Terapeuta facilitadora de tu propia salud y bienestar. Crea armonía en tu cuerpo y en tu mente.

Mi foto
Playa Blanca, Lanzarote, Spain
Titulada en: Reflexoterapia Podal, Masaje Tuina,Reiki, Coach Transpersonal, Master en PNL, Kinesiología Holística Emocional, Acupuntura Zonal, Auriculoterapia, Cromoterapia y Aromaterapia. Teléfono de contacto 679 800 267

23 may 2015

QUE VALORAMOS REALMENTE?



El 12 de Enero de 2007, el periódico estadounidense The Washintong Post llevó a cabo un experimento. Le pidió a Joshua Bell, uno de los mejores violinistas del mundo, que tocara durante 45 minutos en el metro. Joshua Bell contribuyó al experimento y se llevó un Stradivarius de su propiedad construido en 1731 que costó 3,5 millones de dólares, vistió unos jeans y una gorra de beisbol. Joshua había tocado tres días antes en la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos en un gran concierto a 100 euros la entrada más barata y con el aforo lleno.
En 45 minutos sólo le reconoció una joven y dijo - Le vi en el concierto de la Biblioteca del Congreso. Fue fantástico. Dios mío: esto sólo puede suceder en Washington.

Después del experimento, los periodistas del Washington Post se sentaron a reflexionar y se preguntaron asombrados: ¿Es que ya no tenemos tiempo para la belleza? ¿No apreciamos la hermosura cuando pasa por delante de nosotros?.

26 jun 2014

LO QUE EL CORAZÓN QUIERE, LA MENTE SE LO DEMUESTRA

Psiconeuroinmunología: Lo que el corazón quiere, la mente se lo muestra
PSICONEUROINMUNOLOGIATengo 48 años. Nací y vivo en Madrid. Estoy casado y tengo tres niños. Soy cirujano general y del aparato digestivo en el Hospital de Madrid. Hay que ejercitar y desarrollar la flexibilidad y la tolerancia. Se puede ser muy firme con las conductas y amable con las personas. Soy católico. Acabo de publicar Madera líder (Empresa Activa)
IMA SANCHÍS – 18/10/ 2004
Entrevista
Hasta ahora lo decían los iluminados, los meditadores y los sabios; ahora también lo dice la ciencia: son nuestros pensamientos los que en gran medida han creado y crean continuamente nuestro mundo. “Hoy sabemos que la confianza en uno mismo, el entusiasmo y la ilusión tienen la capacidad de favorecer las funciones superiores del cerebro. La zona prefrontal del cerebro, el lugar donde tiene lugar el pensamiento más avanzado, donde se inventa nuestro futuro, donde valoramos alternativas y estrategias para solucionar los problemas y tomar decisiones, está tremendamente influida por el sistema límbico, que es nuestro cerebro emocional. Por eso, lo que el corazón quiere sentir, la mente se lo acaba mostrando”. Hay que entrenar esa mente.
Más de 25 años ejerciendo de cirujano. ¿Conclusión?
-Puedo atestiguar que una persona ilusionada, comprometida y que confía en sí misma puede ir mucho más allá de lo que cabría esperar por su trayectoria.
- ¿Psiconeuroinmunobiología?
-Sí, es la ciencia que estudia la conexión que existe entre el pensamiento, la palabra, la mentalidad y la fisiología del ser humano. Una conexión que desafía el paradigma tradicional. El pensamiento y la palabra son una forma de energía vital que tiene la capacidad (y ha sido demostrado de forma sostenible) de interactuar con el organismo y producir cambios físicos muy profundos.
- ¿De qué se trata?
-Se ha demostrado en diversos estudios que un minuto entreteniendo un pensamiento negativo deja el sistema inmunitario en una situación delicada durante seis horas. El distrés, esa sensación de agobio permanente, produce cambios muy sorprendentes en el funcionamiento del cerebro y en la constelación hormonal.
- ¿Qué tipo de cambios?
-Tiene la capacidad de lesionar neuronas de la memoria y del aprendizaje localizadas en el hipocampo. Y afecta a nuestra capacidad intelectual porque deja sin riego sanguíneo aquellas zonas del cerebro más necesarias para tomar decisiones adecuadas.
- ¿Tenemos recursos para combatir al enemigo interior, o eso es cosa de sabios?
-Un valioso recurso contra la preocupación es llevar la atención a la respiración abdominal, que tiene por sí sola la capacidad de producir cambios en el cerebro. Favorece la secreción de hormonas como la serotonina y la endorfina y mejora la sintonía de ritmos cerebrales entre los dos hemisferios.
- ¿Cambiar la mente a través del cuerpo?
-Sí. Hay que sacar el foco de atención de esos pensamientos que nos están alterando, provocando desánimo, ira o preocupación, y que hacen que nuestras decisiones partan desde un punto de vista inadecuado. Es más inteligente, no más razonable, llevar el foco de atención a la respiración, que tiene la capacidad de serenar nuestro estado mental.
- ¿Dice que no hay que ser razonable?
-Siempre encontraremos razones para justificar nuestro mal humor, estrés o tristeza, y esa es una línea determinada de pensamiento. Pero cuando nos basamos en cómo queremos vivir, por ejemplo sin tristeza, aparece otra línea. Son más importantes el qué y el porqué que el cómo. Lo que el corazón quiere sentir, la mente se lo acaba mostrando.
- Exagera.
-Cuando nuestro cerebro da un significado a algo, nosotros lo vivimos como la absoluta realidad, sin ser conscientes de que sólo es una interpretacion de la realidad.
- Más recursos…
-La palabra es una forma de energía vital. Se ha podido fotografiar con tomografía de emisión de positrones cómo las personas que decidieron hablarse a sí mismas de una manera más positiva, específicamente personas con transtornos psiquiátricos, consiguieron remodelar físicamente su estructura cerebral, precisamente los circuitos que les generaban estas enfermedades.
- ¿Podemos cambiar nuestro cerebro con buenas palabras?
-Santiago Ramon y Cajal, premio Nobel de Medicina en 1906, dijo una frase tremendamente potente que en su momento pensamos que era metáforica. Ahora sabemos que es literal: “Todo ser humano, si se lo propone, puede ser escultor de su propio cerebro”.
-¿Seguro que no exagera?
-No. Según cómo nos hablamos a nosotros mismos moldeamos nuestras emociones, que cambian nuestras percepciones. La transformación del observador (nosotros) altera el proceso observado. No vemos el mundo que es, vemos el mundo que somos.
- ¿Hablamos de filosofía o de ciencia?
-Las palabras por sí solas activan los núcleos amigdalinos. Pueden activar, por ejemplo, los núcleos del miedo que transforman las hormonas y los procesos mentales. Científicos de Harward han demostrado que cuando la persona consigue reducir esa cacofonía interior y entrar en el silencio, las migrañas y el dolor coronario pueden reducirse
un 80%.
- ¿Cuál es el efecto de las palabras no dichas?
-Solemos confundir nuestros puntos de vista con la verdad, y eso se transmite: la percepción va más allá de la razón. Según estudios de Albert Merhabian, de la Universidad de California (UCLA), el 93% del impacto de una comunicación va por debajo de la conciencia.
- ¿Por qué nos cuesta tanto cambiar?
-El miedo nos impide salir de la zona de confort, tendemos a la seguridad de lo conocido, y esa actitud nos impide realizarnos. Para crecer hay que salir de esa zona.
- La mayor parte de los actos de nuestra vida se rigen por el inconsciente.
-Reaccionamos según unos automatismos que hemos ido incorporando. Pensamos que la espontaneidad es un valor; pero para que haya espontaneidad primero ha de haber preparación, sino sólo hay automatismos. Cada vez estoy más convencido del poder que tiene el entrenamiento de la mente.
- Deme alguna pista.
-Cambie hábitos de pensamiento y entrene su integridad honrando su propia palabra. Cuando decimos “voy a hacer esto” y no lo hacemos alteramos físicamente nuestro cerebro. El mayor potencial es la conciencia.
- Ver lo que hay y aceptarlo.
-Si nos aceptamos por lo que somos y por lo que no somos, podemos cambiar. Lo que se resiste persiste. La aceptación es el núcleo de la transformación.
Recomendamos especialmente ver:
Mario Alonso Puig -La Segunda Oportunidad(1 de 2)
En esta ponencia del Dr. Mario Alonso Puig, realizada en un programa de TV3, se explica las reacciones fisiológicas del ser humano ante una incertidumbre, que varía según interpretemos la situación como amenaza o como oportunidad.
Mario Alonso Puig segunda oportunidad 2.

30 may 2014

MEJORA TU VIDA DEJANDO DE HACER

Hay momentos en la vida en que sabemos que queremos cambiar, ir a algún lado, hacer algo importante… pero no sabemos cómo.
Y no se trata tanto de hacer y hacer, sino de dejar de hacer. Dejar ataduras, comportamientos limitantes, y dejar espacio para que  lo nuevo llegue a nuestra vida.

1. Deja de pasar tiempo con las personas equivocadas.

La vida es muy corta como para gastarla junto a personas que succionan tu energía y felicidad. Si alguien te quiere en su vida, harán espacio para ti, no deberías pelear por un lugar. Nunca jamás insistas con alguien que te pasa por alto. Recuerda que los verdaderos amigos no son necesariamente aquellos que se quedan contigo en los buenos tiempos, sino los que permanecen en las peores situaciones.

2. Deja de huir de tus problemas.

¡Enfréntalos! No será fácil, nadie es capaz de salir ileso de todos los problemas. No siempre se puede salir instantáneamente de un problema cuando se presenta, no estamos hechos para eso. De hecho, lo normal es que sintamos tristeza, enojo, dolor, incertidumbre, derrota. Este es el propósito de la vida: Enfrentar los problemas, aprender de ellos, adaptarse y, finalmente, resolverlos con el paso del tiempo. Es lo que nos convierte y moldea a lo largo de la vida.

3. Deja de mentirte.

Puedes mentirle a cualquiera en el mundo, pero no puedes mentirte a ti mismo. Nuestra vida mejorará sólo cuando aprovechemos las oportunidades y la primera y más difícil es ser realmente honestos con nosotros mismos.

4. No dejes tus propias necesidades para lo último.

La cosa más terrible es perderse a sí mismo mientras amas a alguien más, olvidándose de lo especial que es uno mismo. Esto no significa que dejes de ayudar a otros, sino que debes ayudarte a ti mismo también. Si existe un momento para seguir tu pasión y hacer algo que te importa, ¡Ese momento es justo ahora!

5. Deja de intentar ser alguien que no eres.

Uno de los grandes retos de la vida es ser uno mismo en un mundo que quiere que todos sean iguales. Siempre habrá alguien más listo, más guapo, más joven o más viejo, pero NUNCA serán TÚ. Jamás cambies para agradar a las personas; sé tú mismo y las personas correctas te amarán por ello.

6. Deja de aferrarte al pasado.

No puedes comenzar un nuevo capítulo en la vida si sigues leyendo y releyendo el anterior.

7. Deja de tenerle miedo a los errores.

Hacer algo y equivocarse es, al menos, diez veces más productivo que no hacer nada. Cada éxito trae una historia de fracasos detrás y cada error es un paso más cerca de la victoria. Uno termina arrepintiéndose de las cosas que no hizo más que de las cosas que hizo.

8. Deja de culparte por errores pasados.

Quizá amamos a la persona equivocada y lloramos por errores cometidos, pero no importa cuántas cosas hemos hecho mal, algo es seguro: los errores nos ayudan a encontrar a la persona y a las cosas correctas para nosotros. Todos cometemos errores, tenemos problemas e incluso nos arrepentimos de cosas de nuestro pasado. Pero tú no eres tus errores, no eres tus problemas y estás aquí y AHORA con el poder de moldear tus días y tu futuro. Cada cosa que te ha pasado en la vida te está preparando para algo que aún está por venir.

9. Deja de intentar comprar la felicidad.

Muchas de las cosas que deseamos son caras. Pero la verdad es que las cosas que en verdad nos satisfacen son totalmente gratis: el amor, las carcajadas y trabajar en nuestras pasiones.

10. Deja de buscar la felicidad exclusivamente en otros.

Si no eres feliz con quien eres por dentro, no serás feliz en una relación de largo plazo con cualquier otra persona. Primero tienes que crear estabilidad en tu propia vida, antes de que puedas compartir la vida con alguien más.

11. Deja de ser pasivo.

No pienses demasiado las cosas o crearás un problema que ni siquiera estaba ahí en primer lugar. Evalúa las situaciones y toma acciones decisivas. No puedes cambiar cuando te rehúsas a confrontar las cosas, el progreso implica riesgo, ¡Punto! No puedes llegar a segunda base si tienes un pie en la primera.

12. Deja de creer que no estás listo.

Nadie se siente 100% preparado cuando una oportunidad se presenta. Es porque las oportunidades en la vida nos empujan fuera de nuestras zonas de confort, lo que significa que nunca nos sentiremos completamente cómodos en un principio.

13. Deja de envolverte en relaciones por las razones equivocadas.

Las relaciones deben ser escogidas sabiamente. “Mejor sola que mal acompañada”, decía mi abuelita. No hay necesidad de apresurarse, si algo debe ser lo será a su debido tiempo, con la persona adecuada y el momento debido. Enamórate cuando estés listo, no cuando te sientas solo.

14. Deja de evitar nuevas relaciones sólo porque las pasadas no funcionaron.

En tu vida te darás cuenta de que hay un propósito para cada persona que conozcas. Algunas personas te pondrán a prueba, otras te enseñarán grandes lecciones, pero lo más importante es que algunas sacarán lo mejor de ti.

15. Deja de competir contra todos.

No te preocupes si a otros les va mejor que a ti, concéntrate en romper tus propios récords cada día. El éxito es una batalla entre tú y tú mismo, sólo eso.

16. Deja de lado los celos.

Los celos son el arte de contar las bendiciones ajenas en vez de las propias. Pregúntate esto: “¿Qué es lo que tengo yo que todos los demás quieren?”

17. Deja de quejarte y de sentir pena de ti mismo.

La vida tiene sus altibajos por una razón: para moldear tu camino en la dirección correcta para ti. Puede que no veas o entiendas todo en el momento en que sucede, eso puede ser muy duro. Pero recuerda los momentos difíciles que ya has pasado: Casi siempre nos llevan a mejores lugares, personas, estados mentales o situaciones, eventualmente. ¡Así que sonríe! Deja que todos sepan que hoy eres mucho más fuerte que ayer, y así continuarás.

18. Deja de guardar resentimiento.

No vivas tu vida con odio en el corazón. Terminarás lastimándote a ti mismo más de lo que las personas que odias podrían. El perdón no es sólo decir: “Está bien lo que me hiciste”, es poder decir: “No voy a dejar que lo que me hiciste arruine mi felicidad para siempre”. El perdón es la respuesta, déjalo ir, encuentra la paz, ¡Libérate! Y recuerda, el perdón no es sólo para las demás personas, también es para ti mismo. Si debes, perdónate a ti mismo, supéralo e intenta hacerlo mejor la siguiente ocasión.

19. Deja de permitir que otros te bajen a su nivel.

Niégate rotundamente a rebajar tus estándares para adaptarte a quienes se niegan a elevar los suyos.

20. Deja de desperdiciar el tiempo explicando tus razones a los demás.

Tus amigos no lo necesitan y tus enemigos ni siquiera lo creerán. Sólo haz lo que tu corazón te dice que es correcto.

21. Deja de hacer las mismas cosas una y otra vez sin tomarte un descanso.

El tiempo perfecto para tomarte una pausa es justo cuando no tienes tiempo para ello. Si continúas haciendo lo mismo, seguirás obteniendo los mismos resultados. Hay veces que necesitamos un descanso para ver las cosas más claramente.

22. Deja de pasar por alto la belleza de los pequeños momentos.

Disfruta de las cosas pequeñas porque un día mirarás atrás y descubrirás que eran, en realidad, las cosas más grandes. La mejor parte de tu vida serán las cosas pequeñas, momentos innumerables que invertiste sonriendo a quien te interesa de verdad.

23. Deja de intentar que las cosas sean perfectas.

El mundo real no recompensa a los perfeccionistas, recompensa a las personas que hacen las cosas en tiempo y forma.

24. Deja de seguir el camino más fácil.

La vida no es fácil, especialmente cuando planeas realizarte en algo que vale la pena. No tomes la alternativa más fácil siempre, haz cosas extraordinarias.

25. Deja de actuar como si todo estuviera bien cuando no lo está.

Está bien quebrarse de vez en cuando, no tienes que pretender ser fuerte, no hay necesidad de probarle a nadie que todo está perfectamente todo el tiempo. No debería preocuparte lo que los demás piensan. Llora si lo necesitas, es saludable dejar fluir esas lágrimas. Cuanto más pronto lo hagas, más pronto serás capaz de sonreír de nuevo, sonreír de verdad

26. Deja de culpar a los demás de tus problemas.

La capacidad de alcanzar tus sueños depende de tu capacidad de hacerte responsable de tu vida. Cuando culpas a los demás de lo que te pasa, estás rechazando esta responsabilidad: Le das poder a otros sobre una parte de tu vida.

27. Deja de hacerlo todo por todos.

Eso es imposible, y solamente terminarás exhausto. Pero hacer sonreír a una persona, a esa persona especial sí puede cambiar el mundo. Quizá no el mundo entero, pero sí una parte de él: enfocarse es el secreto.

28. Deja de preocuparte demasiado.

Preocuparse no le quita problemas al día de mañana, le quita felicidad al día de hoy. Una manera de saber si vale la pena preocuparse es plantearse la siguiente pregunta: “¿Importará esto dentro de un año? ¿Tres años? ¿Dentro de cinco años?” Si la respuesta es negativa, entonces no vale la pena darle más vueltas al asunto.

29. Deja de enfocarte en lo que no quieres que suceda.

Mejor, enfócate en lo que sí quieres que pase. Pensar positivo es el preámbulo al éxito rotundo. Si despiertas cada mañana con el pensamiento de que algo maravilloso sucederá ese día y pones suficiente atención, descubrirás que estabas en lo correcto.

30. Deja de ser ingrato.

No importa lo bien o lo mal que te ha ido, levántate de la cama agradecido por tener vida. Hay quienes, en algún lugar, luchan por ella desesperadamente. En lugar de pensar en lo que te hace falta, intenta pensar en lo que tienes y que a muchos les hace falta.

15 may 2014

NO SE PUEDE AMAR CUANDO SE ESTA BUSCANDO TANTO AMOR




26 feb 2014

Juanjo Zadel: Multiorgasmo

Juanjo Zadel: Multiorgasmo: ."El secreto de una buena relación es casarse con el otro sin divorciarse de uno mismo"
Antoni Bolinches




Y de autodivorcios está el mundo lleno ¿no creéis? Al menos yo veo tantos... Y cada vez más. 

¿Tan difícil será estar con alguien sin dejar de ser uno mismo? Seguramente sí. 

Aún recuerdo cuando yo me callaba algo que me molestaba de mi pareja para no contrariarla o para conseguir que siguiera pensando que yo era encantador. O para no parecer un repelente. Pero al final me destrozaba por dentro, me peleaba conmigo mismo en una lucha encarnizada hasta que agarraba a mi autoestima por el gaznate y la apretaba y la apretaba y la apretaba hasta que caía al suelo inconsciente, casi sin aliento y a punto de morir asfixiada, la pobre.

Ahora, hace tiempo que ya no me callo. En mi lista de prioridades vuelvo a estar en la posición número uno de mi ranking. Pero el resultado, paradójicamente, siguió siendo el mismo. Bueno, casi el mismo. Tanto antes como ahora estoy sólo, con la diferencia de que ahora no me siento mal. Al contrario. Estoy feliz. Valoro por encima de todo mi bienestar físico, mental y emocional y mi soledad.

Eso no quiere decir que no haya momentos en los que eche de menos compartir mi vida con alguien. Pero nunca más a cualquier precio. Tendrá que ser alguien que me acepte como soy sin tener que controlar lo que digo, lo que siento, lo que hago o cambiar mi manera de pensar, de creer, de estar o simplemente de ser. 

Ya no me preocupa qué debe estar pensando la otra persona de mi. ¿Le gustaré? ¿Le estaré dejando de gustar? ¿Pensará que soy tal? ¿Que soy cual? Mira, te guste o no te guste, éste soy yo y esto es lo que hay. De la misma manera que no pienso hacerme un injerto de pelo en mi preciosa calva o no me voy a teñir de rubio o de pelirrojo sólo para conseguir gustarte más tampoco voy a dejar que me avasalles con tus desprecios, o que me cortes al hablar cuando a ti te parezca, o me impongas tu verdad sobre la mía o que no me prestes atención cuando hablo. No. 

Y es que claro, el precio a pagar por no autodivorciarse es muy caro para algunos (según dicen): terror pavorosamente temido a la soledad. 

Lo que llegan a aguantar algun@s pobres por no perder a esa persona que ni les quiere, ni les respeta, que no hace nada por ell@s y que en el fondo no merece la pena, pero que, simplemente, ya les vale con tal de no estar solos. Y es entonces cuando, sin darse cuenta, empiezan a apretar el cuello de su propia autoestima: “Si es que le quiero.” Apretón. “Si en el fondo me quiere.” Apretón. “Si es muy buena gente.” Apretón. “Se merece otra oportunidad más.” Apretón. 

Entonces entiendo que todo vale ¿no? ¿Incluso sacrificar hasta lo más preciado de uno mismo? por…… ¿el amor? NOOOO. Ése es el error. Que no se engañen, lo sacrifican todo por la soledad. Si no se sintieran sol@s no estarían con esa persona a la que le aguantan tantas vejaciones emocionales. Aunque, la verdad sea dicha, en muchos casos, l@s propi@s ejecutor@s son completamente inconscientes y carentes de maldad e intencionalidad en el daño que están causando. 

Y es que, en el fondo, esa persona no está haciendo ni daño ni nada, es uno mismo quien se lo hace al permitir ciertos comportamientos por encima incluso a veces hasta de la propia dignidad. El problema es cuando ese ser “amado” es considerado como lo mejor que uno puede llegar a conseguir y se aferran a él como si la vida les fuera en ello. ¡Apretón! 

No nos engañemos. El amor no es malo. La soledad no deseada sí. 

Cuando hay amor entre dos personas, cada una piensa en ser feliz. Porque solamente cuando uno es capaz de ser feliz por sí mismo, es entonces cuando podrá estar feliz al lado de otra persona feliz y podrán compartir todas esas cosas buenas y esas cosas malas que ambos tienen, pero siempre desde la felicidad y el amor bien entendido y no desde la dura necesidad de no sentirse sol@.

No, mira ¿sabes qué te digo? que paso de ti. Que yo me merezco a alguien mucho mejor que tú. Porque me merezco que me prestes atención, que me mires a los ojos cuando te hablo. Que tengo unas necesidades sexuales, unas necesidades emocionales, unos deseos, unas ilusiones y unos retos. Que valgo mucho más de todo lo que tú me aportas y me valoras en estos momentos. Así que por mucho apego que tenga hacia ti, por muchos sentimientos encontrados y por muchos hábitos contraídos contigo, con tu entorno y con el mío, yo soy a partir de ahora mi prioridad y mi felicidad, estés tú a mi lado, esté otra persona o esté yo sólo. ¡He dicho!

Os aseguro que llegar a pensar, a decir y sobretodo a creer lo que os acabo de escribir en este párrafo anterior es algo más que un orgasmo. Es un multiorgasmo! tanto para el corazón, como para el ego, para la esencia y hasta para el alma de cualquier persona. Es el boca a boca para aquella pobre autoestima, la que estaba medio ahogada y asfixiada tendida en el suelo.

Si un orgasmo es “la descarga repentina y repetida de toda la tensión sexual acumulada durante el ciclo de la respuesta sexual resultando en contracciones musculares rítmicas en la región pélvica,” no sé a qué estás esperando para descargar repentina y repetidamente toda tu tristeza emocional acumulada durante el ciclo de la relación sentimental resultando en contradicciones personales rítmicas en la región mental. 

Vuelve a creer en tus pensamientos. Da respuesta a tus necesidades e ilusiones como persona. Vuelve a escucharte, a sentirte, a quererte, a valorarte, a re-animarte y a reestablecerte en aquella primera posición del top 10 de cosas importantes para ti, a aquella posición que nunca debiste abandonar, ni por miedo a la soledad, ni por él, ni por ella, ni por nadie.

Dicen que rectificar es de sabios. Pero desde el punto de vista del crecimiento personal este axioma es al contrario. Me hago sabio porque rectifico. 



12 dic 2010

LA INCERTIDUMBRE DE LA REALIDAD

La naturaleza de la vida es contener  el caos y el orden a la vez, así por ejemplo, con cada inhalación de aire,  entran al torrente sanguíneo, remolinos de átomos de oxigeno que llegan hasta la última célula. En el caso de nuestra vida personal, cada quien lucha entre el orden y el desorden. Aquella fruta fresca, acaba por dañarse, lo que era joven, envejece y muere. Si nos damos más  tiempo y observamos nuestra mano, no hay duda de que nos pertenece, sin embargo, no sabemos cómo crecen nuestras células, cómo se regenera la piel, desconocemos el origen que determinó nuestra forma de respirar, todos nuestros sistemas y bioritmos corporales que dan vida a nuestro cuerpo, qué hace que nuestros nervios y músculos se muevan, tampoco hacemos crecer nuestras uñas, conscientemente.

Estas funciones, pertenecen a la parte del cerebro, que rige el sistema autónomo de vida y creación, en cambio la mente consciente se usa para apreciar este mundo y el milagro de la vida.

En el mundo actual, la vida está llena de presiones, que provienen de todos lados. Recordamos el día que perdimos algo o alguien, un retraso que hizo que llegáramos tarde al trabajo, aventurarnos a lo desconocido. Aunque estos sucesos se resuelven, reaccionamos con nerviosimo a lo incierto y lo que se nos escapa del control.

De modo que la próxima vez, tomamos precauciones para controlar que no vuelva a pasar y dominar la situación. Quien busca la perfección, debe aceptar el hecho, de que siempre habrá incertidumbre en todo. Lo que un día fue, quizás hoy ya no sea. Lo que un día estuvo contigo quizás mañana ya no esté. A pesar de que no es agradable la incertidumbre, todos nos hemos beneficiado de ella una y otra vez, en las personas que conocimos en su día, maestros inesperados que nos enseñaron algo nuevo, en las personas que nos brindaron oportunidades, hablar con un desconocido que nos abrió nuevos horizontes, sentir una corazonada y tomar otro trayecto descubriendo algo nuevo o encontrándonos con alguien. El punto es, que todo lo que  visualizamos para el futuro, es cierto, es probable. Nuestro futuro no consta de una situación concreta, sino, de muchas situaciones posibles y éstas se ramifican  a partir del momento presente y de una intención clara de QUÉ queremos hacer,  dejando el CÓMO al Universo, permitiendo que nos sorprenda y con la seguridad de saber que todo es posible.


La vida de todo el mundo es así y sólo nuestro falso sentido del control, nos hace creer que podemos imponer orden, sobre lo que en realidad, es imprevisible. Si logramos aceptar el flujo de la vida y ceder ante él, habremos aceptado la realidad y solo cuando la aceptamos, vivimos en paz, espontaneidad  y alegría, de modo que el orden, es la otra cara del caos y el caos, es la otra cara del orden. El orden humano está hecho de reglas, el orden del Universo fluye con la naturaleza de la vida y es continuo. La realidad que apreciamos y experimentamos, muchas veces, es el resultado de nuestras expectativas. Hasta que no creemos algo, no lo vemos.

Vemos, vivimos y describimos, cada uno bajo nuestro código y filtro de lo que es real y lo que esperamos encontrar y no, de lo en realidad hay. Así, los seres humanos caminamos por la vida, con lo que esperamos ver, oír, tocar, sentir. Cada experiencia vivida se basa en la continuidad, que la alimentamos con nuestra energía, intención, emociones, consciente o inconscientemente. La gran mayoría de situaciones se nos escapan de nuestro control. Si logramos ver y aceptar, sin ninguna expectativa concreta, nada de lo que damos por hecho, seria real. Nuestro mundo es como una prisión, impuesta por el propio ser humano para controlarnos los unos a los otros. Todo lo que concibe la mente humana es limitado. Nos han enseñado que lo mío termina dónde empieza lo tuyo, que tu libertad termina, donde empieza la libertad del otro y la realidad, es que todo es infinito, ¿Quién determina dónde empieza y dónde acaba?
La realidad es como un ave delicada, que tiembla en tu mano y si la retienes por mucho tiempo, muere.

Para avanzar sugiérete una probabilidad....Y SI... y experimenta los resultados!!
 

9 dic 2010

SURGEN EL ENFADO, LA RABIA, LA IRA... ¿QUÉ PUEDO HACER? by OSHO

"Surgen el enfado, la rabia, la ira, ¿qué puedes hacer?. Deja que estén ahí. Mientras estén ahí, estate totalmente, y de repente te darás cuenta de que cuando estás totalmente se vuelven maravillosas. Todo lo relacionado con la totalidad se vuelve maravilloso.  Has de tener en cuenta cómo manifiestas estos estados y con quién. "Ley Causa y Efecto". Busca tu espacio para explotar.

Así que, seas lo que seas, sé total, ésto transformará su cualidad. Esa es la alquimia de la transformación, de la transformación interior. Acéptalo y fluye con el momento. Si fluyes, si realmente profundizas en el enfado, la rabia, la ira, no quedará ningún resto, porque cuando te entregas totalmente se termina. Y una vez que ocurre esto estás fuera de ellas, completamente fuera.

Contempla al niño pequeño que todavía no ha sido corrompido por la sociedad. Cuando se enfada, se enfada de verdad, explota. Un niño tan pequeño, pero se vuelve muy poderoso, parece capaz de destruir el mundo entero. Se pone rojo, totalmente rojo, como si estuviera ardiendo. Observa al niño, lo maravilloso que es, tan vivo. Y después de un momento está jugando y riéndose, ya no queda nada del enfado. Ni siquiera te puedes imaginar que hace sólo un momento estuviera enfadado. Ni siquiera lo sospechas; ¿este niño? ¿enfadado? Ahora es tan cariñoso, tan dulce, ¡y hace un momento echaba fuego!

Así es como hay que vivir la vida. Un día, de repente, dejas de reprimir, nunca ocurrió. Estás de una forma tan total que nunca quedan restos de ningún momento. Siempre estás fresco y joven, y el pasado no supone una carga. No estás cansado, frustrado por el pasado. Eso es lo que quiero decir cuando digo que hay que morir a cada momento y nacer de nuevo...un renacimiento, una resurrección a cada momento".

Osho, Cara a cara con Osho. Ante todo, no dudes

3 nov 2010

ESCUCHATE A TI MISMO


Quien tuvo el poder de convertirte a ti en tu propio enemigo?
Fue acaso un hechicero que dominaba la furia del fuego,
la dirección de las estrellas y las mareas de los océanos?
O fue un dios inmortal todopoderoso al que tú obedecías
como la arcilla en las manos del alfarero?
Quién fue tan poderoso que logró hacer que tú no te quisieras
como no se quiere el agua cuando se escurre en distintas direcciones
y ya dispersa no puede avanzar en dirección al mar?
Tienes que tomar conciencia de que fue alguien igual a ti
el que logró que tu no te quisieras y si quieres vivir la vida vivo,
 tienes que amigarte contigo mismo, abrázate con fuerza en este instante, como si ese abrazo fuese cosa de vida o muerte.
La verdad es que de él depende todo tu futuro.
la vida será más intensa y profunda mientras más apretado sea ese abrazo.
Escúchate a ti mismo de modo tal,  que logres olvidar la voz de aquel que un día hizo
que te convirtieras en tu propio enemigo.